TORK 2012

jueves, 17 de enero de 2008

Escape...



Iglesia ciudad de Castro

Como la vez anterior te invito a darte una escapada de esas rápidas sin pensar. Tomamos una mochila le echamos un poco de ropa, zapatos de repuestos, etc. y un poco de dinero y nos fuimos.

Estamos al borde de la Panamericana Sur y hacemos dedo (autostop) y nos embarcamos en un camión.

Ya arriba van pasando los kilómetros, las ciudades, todo es muy bello, los paisajes, estancias, casas señoriales, etc., pero estas imágenes van quedando en la retina para recordarlos hasta la fecha.

Pronto el hambre nos hace parar en una “picada” o lugar donde se encuentra una posada la cual es asaltada por los camioneros y por supuesto me incluyo (cazuelas de vacuno, de ave, plateada con puré de patatas/ensaladas varias, son los platos más solicitados) y un sin fin de otros platos, que nos los nombraré porque en este instante me dio hambre.

Luego del atracón seguimos en ruta toda la noche entre cabeceando y semi despierto amanece y ya nos encontramos a unos ochocientos kilómetros cerca de Puerto Montt. Ya cerca del mediodía llegamos al canal de Chacao, es donde se corta la Panamericana y hay que embarcarse para cruzarlo y llegar al pueblo de Chacao y posteriormente a la ciudad de Ancud para después recorrer casi toda la Isla de Chiloé en toda su extensión.

Como andaba patiperreando por los caminos recorrí diversas ciudades, pueblitos, mercados y visite varias iglesias de esas que son bien antiguas algunas datan del siglo 17 y 18, las que todavía están en pié y mantenidas por la ciudadanía para su conservación, bueno ahora ya algún ministerio se puso las pilas y han comenzado a restaurarlas pero conservando el mismo estilo y con los mismos materiales, son bellísimas, me parece que son patrimonio de la humanidad o algo así.


Al fin de vuelta de nuevo en la ciudad de Ancud visite algunas personas que conocía desde antes, aproximadamente el año 1978 cuando casi tuvimos el conflicto con Argentina por unos diferendos arbitrales de soberanía y que gracias a Dios no pasó más allá y que fue el minuto cuando ya todo estaba perdido.

Esa es otra gran aventura de la cual no hablaré porque fue muy difícil y poco grato el momento que se vivió.

Retomamos nuevamente el tema, quedamos en que visité algunas personas conocidas y nos tomamos unos “pichunchos” (pisco con vermouth y limón) muy agradable para el tiempo que hacía, estaba lloviendo, lo mas grato para mi, aparte del aire puro y limpio, costero…fascinante. Pero como todas las cosas buenas duran poco me tuve que marchar y volver a cruzar el canal y volver a Puerto Montt donde me esperaban unos conocidos y por supuesto ya se habrán dado cuenta que soy muy bueno para la gula, nos esperaban con empanadas de loco, locos con mayonesa y un gran plato de greda con un mariscal de chuparse los dedos (creo que a estas alturas ustedes deben estar con ganas de comer alguna cosa) y brindando con una rica chicha de manzana (sidra) mientras fuera de casa llovía a cántaros.

Hasta ese momento todo iba muy bien, pero con nostalgia y pena por haber dejado esa zona , pero de vuelta en camión nuevamente al chofer se le ocurrió pasar por la ciudad de Valdivia hacia la costa y paramos cerca de una casa muy humilde, nos bajamos y entramos a la casita; nos atendió una señora media regordeta diciéndonos pasen caballeros por este lado ahí están los tambores y los mesones, encima están las piedras, no se imaginan como yo al sacar una tapa de esos tambores que tenían fuego por debajo, con un gancho metálico lo introducimos dentro del tambor y sacamos unas jaibas, siii jaibas que uno las colocaba en el mesón y con la piedra procedías a golpear las patas y la caparazón para posteriormente comer su contenido uuuhmmmm exquisito (debo decir que solamente yo me comía las patas, son deliciosas.















Puente Ferroviario Malleco
Ya tarde tomamos rumbo hacia la carretera panamericana para estacionarnos en un camino vecinal para dormir, porque como sabrán el atracón inmenso que nos dimos causa arrebatamiento y te quedas dormido. Al día siguiente continuó nuestra ruta pasando cerca de la ciudad de Temuco, pero esta vez fuimos a un poblado mapuche donde nos atendieron bien, al principio no éramos bienvenidos porque ellos son desconfiados con los huincas como nos dicen a los de ciudad, pero poco a poco nos fuimos haciendo mas amigables y almorzamos junto con ellos, por el resto de la tarde nos enseñaron varias cosas de su cultura y retomamos nuestro viaje hasta que llegamos a Santiago de una sola vez.

Nos despedimos de mi amigo chofer y yo quede al igual que en otras veces con un aire de nostalgia, con una sensación de seguir, de continuar con esa vida de patiperro sin rumbo, sólo disfrutar de las bondades que esta vida te ofrece y que no todos están dispuesto hacer por las incomodidades que conlleva al hacer estos viajes relámpagos que yo digo un ESCAPE, pero te sirve de sobremanera porque es como darte un baño de relajo, de sacarte el stress, de ser libre y disfrutar observando las maravillas que te ofrece esta tierra, el mar, la cordillera y que gracias a Dios he sido un bendecido por poder hacerlo y que antes había dicho en otra narración, mientras se me den nuevas oportunidades de hacerlo, indudablemente que lo volveré a intentar todas las veces que mi cuerpo pueda.
¿Y a ti que te pareció esta escapada? ¿Alguna vez lo has realizado?

Martín Blog© 2011/ | Plantilla Blogger | Diseño de Tork

7 comentarios:

  1. 7 han comentado:
    Airblue dijo...
    Pero chico....!! cómo has mejorado el blog. Está precioso. Y la canción de Denver le va muy bien. Me gusta la música country me encanta. ¿sabes que yo empecé con la guitarra?, después me pasé al piano y hace tiempo que lo dejé ahora es mi hija pequeña quien me sigue. Mañana te contestaré mejor a tu entrada. Esta vez te has esmerado. Es muy tarde, mañana lo leeré con tranquilidad.
    Te prepararé las fotos que me has pedido de las pinturas también. No se me olvida.
    Un abrazo Tork.
    17 de enero de 2008 22:54

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  2. Airblue dijo...
    Vuelvo a entrar aunque hoy también es tarde, pero la noche y en mi foro lo suelo decir siempre, es mi mejor aliada. Me desconecto de todo y de todos.
    Pues nunca he tenido la suerte de hacer una escapada como a la que nos invitas, mis viajes han sido programados, bien de vacaciones,o de trabajo, pero de repente y a la aventura tal como lo describes,no. Antes no era fácil hacer algo así para una chica y menos en autostop y no digo que no me hubiera gustado, pero me faltó romper con todos lo tópicos y lanzarme. De todo los modos lo importante es liberarse de tensiones, salir de la rutina, conocer mundo y poder tener experiencias tan fantásticas para luego recordar y contar.
    Si alguna vez vuelves a escaparte, mete en tu mochila un poco de mi "aire azul" para que te acompañe. :-)
    UN abrazo Tork.
    20 de enero de 2008 21:51

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  3. PIZARR dijo...
    Hola Tork, muy chulo tu viaje, pero no dices cuando lo realizaste, de jovencito o ahora ??

    Yo realicé más de una escapada de ese tipo. Primero de jovencilla, después con mi pareja ya casados hicimos más de un viaje " loco"

    La escapada más reciente fué hace pocos años. Dejé a mi ñiña con su padre y con mi ama y me fuí sola en pleno invierno a recorrer Ucrania.

    Fué un viaje inolvidable. Quizás me anime a escribir sobre ello.

    BUENAS NOCHES, UN BESO
    20 de enero de 2008 22:15

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  4. Tork dijo...
    Creo que no faltará el momento propicio para realizar una escapada y claro está que dentro de mi mochila echaré un poco de ese Aire Azul para que veas como se pasa de bien en estas arrancadas locas que de pronto conviene hacerlas para sacudirse de todo lo que te agobia.
    Pienso Air que deberías hacerlo alguna vez, a lo mejor puede ser que te ayude a sacar lo rutinario que es esta vida que no te suelta, te mantiene atrapada. Es como si volvieras a un pasado de que algo quedo en el tintero y no lo pudiste realizar, hacerlo sin mucha preparación como tu dices, sino mas bien improvisado.

    Un beso Air.
    20 de enero de 2008 23:54

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  5. Tork dijo...
    Es que siempre tuve esa libertad de hacerlo cuando joven, a mediana edad y hace como unos 5 años atrás, pero no sólo he hecho escapadas de ese tipo, sino también a la cordillera que me fascina (montañismo y senderismo).
    Como sabrás acá en Chile tenemos mucho por recorrer hay harto desierto, harta cordillera, harta vegetación, harto hielo e islas, entonces es cosa de que pronto te des una escapada y consigas eso tan deseado y que a muchos les cuesta, la libertad.
    De eso sería muy bueno que narraras ese viaje a Ucrania debe haber sido una grata experiencia. Espero que te animes a escribirlo.

    Un abrazo Pizarr
    21 de enero de 2008 0:04

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  6. Fair Lady dijo...
    Hola Tork, quería dejarte una firma en tu libro, pero no veo un libro de visitas en tu blog...
    Quería agaradecerte tu paso por mi blog y además me siento muy halagada que me hayas incluido en tu página. Muchas gracias.

    Sobre esta escapada: menuda hambre me está entrando... y aunque no conozco tu país, seguro que los paisajes son preciosos.

    Por cierto, la foto de Torres del Paine es preciosa. Un abrazo
    24 de enero de 2008 12:15

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  7. Tork dijo...
    Espero que estes bien.
    Besitos Pankekita
    21 de febrero de 2008 0:58

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